Dormir cerca de tu recién nacido

El término "colecho" se compone de dos palabras, lecho (camita) y co (que significa juntos). Este término indica la práctica de que el bebé y la madre o el padre (¡o ambos a la vez!) permanezcan juntos, incluso durante la noche, especialmente al principio de la vida del bebé.

Es importante distinguir estre el colecho y compartir la cama, ya que ambas son prácticas relacionadas con dormir cerca del bebé, pero presentan diferencias significativas. Mientras que el colecho se refiere a la práctica de dormir cerca del bebé, en el mismo entorno pero no en la misma cama, en el caso del bed-sharing el bebé duerme en la mism cama que los padres, a menudo en estrecho contacto físico.

Adoptar las medidas de seguridad adecuadas para garantizar un entorno de sueño seguro y protegido para el niño es crucial, y en este sentido compartir la cama puede plantear riesgos para el niño como la asfixia accidental o la superposición de mantas, almohadas u otros objetos en la cama de los padres.

En primer lugar, es esencial hacer una distinción importante: hay dos tipos de colecho, el seguro y el inseguro.El colecho puede tener muchas ventajas y beneficios, pero es importante respetar una regla básica: vecinos sí, pero cada uno en su cama. Se puede llevar al bebé a la cama de los padres para amamantarlo y abrazarlo, pero después hay que devolverlo siempre a su propia cuna.

Compartir la cama puede entrañar riesgos adicionales, como la asfixia accidental o la superposición de mantas, almohadas u otros objetos, por lo que se desaconseja encarecidamente, ya que no garantiza las condiciones necesarias para un sueño seguro del lactante.

El colecho bien practicado ayuda a reducir el risgo de SMSL, muerte súbita del lactante, pero sigue requiriendo cuidados y la adopción de prácticas de sueño seguras para proteger al bebé. Es escencial elegir una cuna especialmente diseñada y certificada según la norma vigente (EN 1130:2019), para poder estar cerca del recién nacido con tranquilidad. Se desanconseja las soluciones improvisadas, ya que pueden esconder peligros nosiempre evidentes y críticos para la seguridad del bebé.

El colecho en los primeros meses de vida del bebé pueden elegirse y practicarse por varias razones:

• Facilita la lactancia materna. la proximidad física durante la noche permite a la madre responder rápidamente a las necesidades del bebé y establecer un vínculo emocional más fuerte.

• Favorecer el sueño del bebe: estar cerca de los padres durante la noche puede ayudar al bebé a sentirse seguro, tranquilo y protegido, favoreciendo un sueño más profundo y reparador.

• Refuerza el vínculo afectivo: el contacto físico puede favorecer el desarrollo de un vínculo afectivo seguro y duradero entre el bebé y sus padres, contribuyendo al bienestar emocional del bebé.

• Simplifica la gestión de los despertares nocturnos: compartir el mismo entorno de sueño puede simplificar la gestión de los despertares nocturnos del recién nacido, permitiendo a los padres responder rápidamente a sus necesidades sin tener que desplazarse a otra habitación.

Regula el ritmo sueño-vigilia del bebé: dormir en la misma habitación que los padres ayuda al bebé a ajustar su ritmo circadiano al de los padres.

No existe un límite temporal universal o absoluto para el colecho, ya que cada situación es única y depende de las circunstancias individuales. Algunos padres optan por practicar el colecho sólo durante los primeros meses de vida del bebé, mientras que otros pueden seguir haciéndolo durante más tiempo. Es importante tener en cuenta que el colecho se recomienda durante los primeros 6 meses de vida del bebé y evaluar constantemente la situación y las necesidades tanto del bebé como de la família, teniendo en cuenta el bienestar de ambos.

Durante los primeros meses de vida, como hemos dicho, es fundamental crear un entorno seguro y cómodo para que el recién nacido duerma. Para ello, lo mejor es que el bebé pueda dormir en una cuna, un espacio dedicado que se coloca junto a la cuna. Para ello, existen cunas especiales para colecho, también llamadas cunas de colecho, especialmente diseñadas y homologadas para permitir que el bebé esté cerca de sus padres durante la noche, pero con total tranquilidad.

Optar por una cuna de colecho permite practicar el colecho con total seguridad, disfrutando de todas las ventajas prácticas y emocionales ligadas, como hemos visto, a la proximidad durante el sueño. Las cunas de colecho, como las de la línea Chicco Next2Me, pueden colocarse junto a la cama de los padres, ofreciendo al niño un espacio propio dedicado al descanso y adaptado a sus necesidades específicas y, al mismo tiempo, permitiéndole sentir la cercanía de sus padres. 

Las cunas Next2Me están diseñadas para mantener a tu hijo junto a la cama desde el nacimiento hasta los 6 meses, o incluso más allá, hasta los 4 años, si optas por la cuna Next2Me Forever. La línea también incluye el modelo Next2Me Twins, una solución especialmente diseñada para padres de gemelos: está equipada con un separador transparente que permite a los bebés descansar juntos de forma segura, verse y oírse, además de estar al alcance de sus madres durante el sueño.